A cuenta gotas y con el tiempo contado, con el tiempo contando lo que es contado, con los minutos que transcurren mientras se van contando, con reloj y contra reloj. La mirada al espejo, el espejo a la mirada, las miradas se cruzan... ¡Puta madre, que puto dia, que puto trafico, que puto lo puto!... y el agua fria cubre su cara, su cara se refresca con el agua fria, sus manos se enfrian con el agua fria que sale de la llave del lavabo de su baño, la llave se enfria, su cara se enfria, sus manos se han enfriado, su animo se ha encendido... ¡Carajo y que se arreglo, ¿eh?, ¿que?, pinches putos de mierda, valen pito!... Su mirada va de la mirada del espejo al agua que se va, se va sin pausa, el agua sale y se va, la mira, mira el espejo, mira su mirada, se da cuenta que sus ojos, su rostro se ve cansado, y se mira con mas detalle y cae mas agua fria sobre su rostro ajado por los años, porque pasan los años, por las preocupaciones, por la falta de respuestas, por el exceso de preguntas, por las ideas, por los sueños, si, si todo eso se ha ido quedando en su cara, en su piel, en el siguiente dia, en las canas, en la barba que se llena de canas poco a poco para recordarle que se va el tiempo, en su calva, en su mirada que viene del espejo, ahi, en el, alrededor de el, en lo que toca el, ahi esta el tiempo, en el agua fria que se va, en ese minuto que se va con el agua... ¡Chingada madre, absurdo, todo el dia fue un absurdo, todo hasta ahora a sido un absurdo!... las gotas de agua se cuelgan de su barba, se equilibran antes de caer e irse, cierra la llave, fuerte, firme, desesperado, tal vez consumido por la tristeza, tan vez por la tristeza que lo consume o por lo que ha consumido para la tristeza.
Se cambia de ropas, unos jeans, una camisa holgada, del cajon de su buroe, saca una pistola, sale de su departamento, baja las escaleras... "pero no me la vuelven a aplicar, si nadie hace nada, yo si y a la chingada", mientras baja por la escaleras se va acomodando la pistola para que no se note, ya ha logrado que se note lo que no se nota, el frio de la pistola es absurdo sobre su piel, frio, demasiado frio de metal, frio de muerte, muerte con frio, frio y solo frio, frio como agua, sale a la calle, se dirige hacia avenida reforma, toma reforma por la banqueta que divide la lateral de los carriles centrales... "Ahora si pinches putos, van a saber que es protestar, van a saber que es intolerancia y van a saber de mis derechos, van saber mis derechos, hijos de puta"... camina rapido hacia la glorieta de Cuauhtemoc, de la nada un perro negro se le acerca lo huele mientras camina, el olor lo llamo, o no huele, o no lo llama nadie, o es solo la calle y quien pase... "pinche perro loco, sacate, orale, a chingarasumadre, fuscale"... la cabeza se mueve a ambos lados mientras camina, expresion canina, lame la mano y para que mostrar cariño si siempre, por lo general la respuesta es un patin, si siempre es madrazo, para que la nobleza, para que ser el mejor amigo del mejor asesino... "Puto perro, que me vas a pegar algo, rabia, algo, pinche perro"... sigue caminado hacia a la glorieta, aun en la glorieta se ven las antorchas, una glorieta que no es redonda, que no es glorieta, que es ya solo una estatua ahi, en el medio de la avenida reforma, los cuerpos desnudos de los manifestantes se alcanzan a notar, cuerpos amorfos, sin forma, sin lineas y llenos de curvas, hombres y mujeres alimentados por promesas y chile y verde, por palabras que no entienden, cuerpos desnudos que ya ha nadie afectan, que ya nedie ve, imagen de agresion visual que ya nadie ve... "Putos se les va a cabar su fiestecita, su lunada"... el perro le muerde el pantalon, lo jala, mueve la cola, se frena, mira al perro, el perro balancea la cabeza de un lado a otro, cruzan miradas, le acaricia la cabeza, el perro corre rapido, en corto, dos saltos hacia alla, dos saltos hacia aca, moviemiento y balanceo de cabeza, otra vez caricia, se agacha para acariciarlo, se acerca para acaraciarlo, toma una piedra de una de las jardinera y la avienta, el perro corre tras ella, el camina hacia la glorieta... "Ya les va a llegar su fiestecita, ahora si hijos de puta"... se dispone a cruzar Insurgentes, va sacando la pistola, el perro lo jala con tal fuera que que lo hace caer de nalgas a la banqueta, al momento pasa un carro a exceso de velocidad sobre donde hubiera estado el de no haber sido jalado por el perro, su corazon late acelerado, el perro a su altura le lame la cara, el guarda la pistola y se levanta, camina de regreso... "Se salvaron esta vez putos, se salvaron, pero otro desmadrito y se los carga la chingada"... el perro camina a su lado, el acaricia su cabeza... "pinche perro loco, me salvaste, hasta podras dormir calientito"... sube las escalera y el perro tras el, abre la puerta del apartamento y entra primero el perro, "pinche perro loco, perro loco, pa nombre, perro loco", cruzan sus miradas, ambos piensan mientras balancean la cabeza... "hay que estar loco para estar conmigo".
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